El gran timo de los productos ecológicos

Cada vez son más las personas que empiezan a consumir productos ecológicos, ya sea desde unos tomates cultivados de forma ecológica hasta tés, chocolate o galletas.

Este “nuevo” estilo de vida está muy bien porque estos productos son respetuosos con el medioambiente, son sostenibles, saludables para nosotros, no contienen pesticidas, aditivos ni antibióticos, tampoco están modificados genéticamente, sin duda son más sabrosos y por supuesto tienen unos niveles de calidad excelentes.

Sin duda, yo recomiendo consumir este tipo de productos, teniendo como único inconveniente que son un poco más caros, aunque el incremento del precio es razonables porque al ser ecológico significa que no hay tratamientos para acelerar la producción, no se “sobre alimentan” a las hortalizas por ejemplo, con algún tipo de producto químico, por esto tienen una producción algo menor, además se tiene que tener un cuidado más especial ante ciertas plagas o enfermedades, recuerdo que no están “vacunadas” y un largo etcétera.

El problema empieza cuando industrias y empresas ven como este tipo de productos van adquiriendo mayor importancia en los consumidores y como en los supermercados se va haciendo huecos exclusivos para productos ecológicos.

Aquí es donde entran los “lobos” a atacar porque la gente no sabe muy bien todavía distinguir un producto natural o ecológico por las etiquetas, las cuales la mayoría son nuevas.

Es muy fácil poner en el envase “producto ecológico” o “100% natural”, una pegatina de un árbol, un huerto o algo por el estilo, y subir el precio, eso sí que es fácil para algunos.

Somos fácilmente engañados una y otra vez porque realmente no sabemos lo que comemos o en el mejor de los casos no sabemos cómo se ha hecho o de donde viene lo que ingerimos.
Y es importante saberlo porque va a formar parte de nosotros, va a hacer crecer de forma sana o nuestros hijos.

Os dejo un enlace donde explica como McDonald´s, que es representado por la comida basura cambia de pensamiento y ofrece comida orgánica.

Claro está que, solo hicieron la publicidad, cambiaron los envases, y presentaron las típicas hamburguesas o nuggets de otra forma.

Presentan "bonito" comida de McDonald's como si fuera orgánica. ¿Se darán cuenta los comensales?


Por esta misma razón no vayáis a la estantería de los productos ecológicos y compréis las primeras galletas que veáis.

“Son ecológicas porque pone en el paquete pone que son “naturales” y cuestan 2€ más que las normales”  NO, ¡Error!

Ir a la estantería y mirar con atención, leer un poco y ser críticos, buscar las etiquetas legales, las verdaderas pegatinas que dicen que lo que tienes en la mano, es 100% un producto ecológico.
Quizás al principio os cueste más saber cual es pero con el tiempo iréis derechos al grano

De las etiquetas Internacionales podemos encontrar:

El Ángel Azul (Alemania)

Cisne Blanco (Suecia, Noruega, Finlandia e Islandia)

Green Seal (Estados Unidos) 

Environmental Choice (Canadá)

Consumir más productos ecológicos pero no compréis algo porque tenga el envase bonito, sino porque realmente habéis mirado, no os dejéis engañar.

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