Plantas como bioindicadores

Hablando de los nematodos como bioindicadores se me ha ocurrido seguir escribiendo sobre estos bioindicadores, esta vez en plantas para darles un poco más de protagonismo, ya que casi todo se lo llevan los animales al ser más “cucos”.

Para introducirnos un poco diremos  que las plantas crecen y se desarrollan bajo determinados requerimientos ecológicos que condicionan su presencia y extensión geográfica.

Teniendo como ventaja el conocimiento de la autoecología (estudio de las adaptaciones de las especies  individuales a su ambiente y las relaciones que mantienen con él como por ejemplo, la luz, la temperatura, el pH, la humedad…) de dichas plantas, nos permite cartografiar correctamente su distribución real y potencial, nos permite decidir acerca de su utilidad en la restauración vegetal de un territorio o su posible potencial como bioindicador.

Pero, ¿ qué es un bioindicador del que tanto estamos haciendo mención? un bioindicador es un indicador formado por  una especie o por un grupo de especies (animal o vegetal) que nos aporta información sobre ciertas características ecológicas del medioambiente, es decir, físico-químicas, micro-climáticas, biológicas y funcionales,  o sobre el impacto de ciertas prácticas en el medio.
Se utilizan sobre todo para la evaluación ambiental (seguimiento del estado del medioambiente, o de la eficacia de las medidas compensatorias, o restauradoras).


Entonces, para que una planta sea un bioindicador debe cumplir algunos requisitos muy específicos y los que más se acercan a estos requisitos son las algas, hongos, líquenes, briófitos (plantas terrestres no vasculares, descendientes de las algas) y los pteridófitos (helechos y similares).

Ahora vamos a hablar un poco de algunos de ellos para que sepáis el por qué son llamados bioindicadores.

El interés de las algas es debido a sus exigencias nutricionales. Muchas de ellas son bioindicadoras de la cantidad de materia orgánica del agua. Utilizadas así para la monitorización de la calidad de las aguas.

¿Cómo saberlo? Algunos grupos de algas como los dinofitos o los eugleofitos se desarrollan en aguas eutróficas, quiere decir en aguas contaminadas.

Sin embargo las algas rojas, verdes y algunas cianofitasy se desarrollan en aguas oligotrofas (aguas limpias).

Sabiendo esto podemos obtener información tan diversa como;

• Bioindicadores empleados para la clasificación aguas (Directiva Marco del Agua 2000/60/CE).
• Composición, abundancia y biomasa del fitoplancton.
• Composición y abundancia de otro tipo de flora acuática (macrófitos y fitobentos).
• Composición y abundancia de la fauna bentónica de invertebrados.
• Composición, abundancia y estructura de edades de la fauna ictiológica.

Los hongos pueden ser bioindicadores indirectos del estado fisiológico-estructural del ecosistema dependiendo de las formas de vida que lleven (recurso que explotan para su supervivencia).

Los hongos micorrizicos  por ejemplo, nos permiten conocer el estado de madurez de un bosque debido a su cantidad y abundancia.

O los hongos parásitos, por su cantidad y cualidades nos indican posibles estados fitosanitarios de la vegetación.

Los líquenes son capaces de responder positiva o negativamente a varios factores ambientales y por tanto, pueden ser considerados indicadores de la salud global de los bosques.

Su composición y diversidad ha sido utilizada para estimar la calidad y cantidad de los componentes que forman la estructura y madurez de los bosques además de ser bioindicadores de la calidad del aire.

Los briofitos actúan igual que los líquenes antes descritos, el problema reside en que la utilidad de estos bioindicadores ha sido poco estudiada por el momento y necesitan desarrollar más la técnica o conocer bien a esta clase de plantas.

Si entramos en detalle del último grupo, los pteridófitos (helechos y similares) junto con los espermatófitos (planta provista de semillas mediante las que se reproduce) podemos decir que debido a las características que presentan solo permiten la comparación ecológica subjetiva frente a otras zonas porque no pueden precisar la amplitud real del factor ecológico que nos indican.

Sin embargo algunos factores ecológicos que pueden ser estimados con estas clases de plantas son;

• La termicidad
• El pH
• Temperaturas frías
• Humedad
• Sales
• Aridez
• Contaminación
• Nitrificación

Espero que os haya gustado y que si tenéis alguna duda respecto a este tema o cualquier otro, no dudéis en poneros en contacto conmigo, ya sea a través del blog, correo electrónico o redes sociales.

Feliz fin de semana a todos.


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